De México para el mundo
Subtítulo La Fundación Casa de México en España es el vínculo entre dos grandes naciones. Su fundador Valentín Díez Morodo nos cuenta las principales razones para su creación.

La Casa de México se ha convertido desde su apertura en una embajada cultural, artística, científica, empresarial, gastronómica de nuestro país en España y Europa. En su atractiva sede en Madrid se han realizado numerosas exposiciones que ensalzan el valor cultural de México, con muestra del maestro Toledo, Frida Kahlo, Pedro Friedeberg o Betsabeé Romero. Mientras escribo estas letras la ciudad de Madrid admira el altar de muertos de la calle Alberto Aguilera, con piezas de hojalata repujada, cartonería y piedra negra.

Una muestra de la grandeza de México. A la vez se celebra el I Encuentro de científicos mexicanos y españoles en la Casa de México. Cineastas como Michel Franco o Diego Luna, se dan cita en un hogar cultural donde el cine tiene hasta su sala Cinépolis. Escenario de encuentros de las letras iberoamericanas y de la música. Alondra de la Parra, directora de orquesta de fama internacional también pasó por ahí.

La Fundación Casa de México en España, en su misión de promover la gastronomía mexicana, a través de su programa gastro-empresarial Entre Sabores, presenta un distintivo para restaurantes mexicanos que brindan una auténtica experiencia gastronómica mexicana y ofrece el recetario digital: “La grandeza gastronómica que posee México” con más de 100 recetas de platillos mexicanos. Tequilas de colección y la cocina de Punta Arena dan sabor al lugar. En octubre de 2018 abrió sus puertas la casa de México en España en un antiguo palacete que ya es un templo de la cultura mexicana. Tras cuatro años de intensa actividad, es una ventana de México en Europa gracias al sueño de Valentín Díez Morodo y la ejecución del equipo de Ximena Caraza, una gran divulgadora de nuestra cultura y nuestros tesoros.

Buena parte de Casa de México se dedica también al fomento de las relaciones empresariales entre los dos países. El mecenas del proyecto, el presidente de la Fundación Casa de México, Valentín Díez Morodo, espera que se convierta en un “lugar de privilegio en las relaciones empresariales y de inversiones entre ambos países” como señaló en su inauguración, y ahora con más de seis mil empresas mexicanas en España es más que una embajada. Díez Morodo nació en México 1 de junio de 1940, con padre de origen Leonés aprendió de joven a amar los dos países. Comparte su pasión por el fútbol, es dueño del Toluca, con el consejo de administración de numerosas empresas, fue propietario del grupo Modelo que fue su gran escuela y con su talento le dio una perspectiva internacional. Hoy la cerveza del grupo Modelo está en más de 180 países.

Su obra traspasa fronteras. y su experiencia emprendedora la aplica con sabiduría en grandes proyectos. “El trabajo lo vence todo”, es su lema. “Además del cariño y la gratitud por España, llevo más de treinta años de relaciones bilaterales México- España, me preguntaba ¿cómo puedo dejar un legado de todas las familias? que mejor que hacer la Casa de México en España?”. Así explicaba Valentín su ilusión por este proyecto. Con los pilares de cultura y educación, vinculado directamente con la gestión de la Universidad Iberoamericana donde se formó, es fiel a sus raíces pero sus proyectos no tienen barreras.

Y su trabajo, empatía y energía es inagotable,“trabajo con la ilusión del primer día de mi vida”. Ha declarado. Para el futuro confía mucho en el poder de la tecnología, la internacionalización y el comercio exterior y como declaró para Líderes Mexicanos, “beneficiar la calidad de vida del personal en las empresas, todo lo que nos pueda ayudar a cumplir con los principios de las empresas socialmente responsables y fortalecer a las familias.” Asesora a muchos de los hombres más poderosos del mundo empresarial. y también a los más jóvenes desde su labor en la universidad o con becas. La Fundación IE ha lanzado el Fondo de Becas Valentín Díez Morodo a la Excelencia con el objetivo de empoderar a centenares de jóvenes talentos. Un filántropo siempre interesado en impulsar el factor humano y los valores de la cultura y la familia.