Marqués de Riscal (Álava, España)
Situada en el municipio de Elciego (Álava), nos traslada a una bodega-hotel que se ha consolidado como referente de ocio en el sector. ‘La ciudad del vino’ está diseñada por el arquitecto canadiense Frank Gehry –autor también del Museo Guggenheim de Bilbao, entre muchas otras obras–, a quien se le confió el proyecto de crear un modelo de bodega vanguardista y alejado de los cánones tradicionales. La construcción se ha convertido ya no solo en símbolo de la marca, sino también en un icono de la arquitectura modernista.
Château Cheval Blanc (Burdeos, Francia)
La obra del Pritzker francés Christian de Portzamparc, es un lugar emblemático del país. Como explica la propia marca, la bodega está concebida “de fuera hacia dentro”, para que el paisaje de las 42 hectáreas predomine respecto al interior, donde se encuentran las 566 barricas que producen vinos extraordinarios como el Le Petit Cheval o el homónimo Château Cheval Blanc.
Ysios (Álava, España)
La bodega es una sorprendente silueta integrada en Laguardia, dentro del paisaje de la Sierra de Cantabria. Diseñada por el maestro Santiago Calatrava, la bodega genera algunos de los mejores riojas del país bajo una arquitectura basada en muros de hormigón armado que recuerdan a una hilera de barricas.
Medhurst Winery (Melbourne, Australia)
La bodega está situada en la zona vinícola por excelencia de Australia, el Valle de Yarra. De las 80 bodegas concentradas en la zona, Medhurst Winery fue de las primeras en combinar arquitectura y ocio a la experiencia del vino. Más de 12 hectáreas en las que disfrutar del paisaje y un clima de ensueño.
Quinta de Nápoles (Portugal)
Los viñedos están plantados en terrazas sobre el río. La construcción, de Andreas Burghardt, hace del minimalismo su seña de identidad.
L’And Vineyards (Montemor-o-Novo, Portugal)
Este hotel, construido para los amantes del enoturismo, está basado en una sofisticada arquitectura contemporánea y mezcla las comodidades esenciales de un resort con la filosofía de una bodega tradicional. Sin duda, el ‘resort del vino’ por excelencia.
Dominus (Napa, California, EE UU)
En este recorrido, no podía faltar el grupo de arquitectos Herzog & de Meuron, que con la bodega Dominus, en el valle de Napa, en California, marcó el inicio de las bodegas ecológicas.
Peregrine Winery (Central Otago, Nueva Zelanda)
Considerada la bodega de la nieve, por su situación en las montañas de Queenstown, fue concebida como una de las propuestas ecológicas más ambiciosas en la historia del país a comienzos del siglo XXI. El techo de la bodega está inspirado en las alas del halcón peregrino en pleno vuelo y simboliza la libertad para todos aquellos que acaban visitando la bodega.
Viña Vik (Chile)
Ubicada en la comuna chilena de San Vicente de Tagua Tagua DesUllant, en la Región del Libertador General Bernardo O’Higgins, la bodega está ideada para tener un impacto mínimo sobre el paisaje, por lo que su diseño emplea conceptos vanguardistas y las últimas tecnologías.
Nals Margreid (Nalles, Italia)
Una gran bodega subterránea, una nave de barricas y una torre para la elaboración del vino son los tres pilares de Nals Margreid, construida en un entorno rodeado de viñas y árboles frutales que contrasta con la presencia de rocas de pórfido.