1. BLUE LAGOON (Reikiavik, Islandia)
El efecto parece casi
un milagro: te sumerges en aguas a 37ºC en
un lugar que está de 5 a 8ºC, donde quitarte
el abrigo es un verdadero disparate… Otra
curiosidad es que esta agua termal es única, 2/3
de ella proceden del mar y sólo 1/3 de la lluvia.
Las algas verdiazules le dan el característico
color azul turquesa, y también destruyen
las bacterias contaminantes que traen los
bañistas, protegen la piel de los rayos UV y
estimulan la producción de colágeno. El agua
de la Laguna Azul es purificante, de hecho los
dermatólogos islandeses han constatado las
virtudes curativas que tiene en los afectados
por psoriasis, aún más si se envuelven en los
barros de la laguna.
2. CAGALOGLU HAMAMI (Estambul, Turquía)
Si existe un buen apellido para un gran baño,
es el de turco. Aquí estamos ante uno de los grandes monumentos
al descanso, el agua y el relax: el hammán de Estambul. El más
antiguo y más prestigioso, sus instalaciones son espectaculares, y
sus servicios, como el baño con esponja, la limpieza, el masaje, son
todo un rito. En sus mármoles tus poros se van abriendo mientras los
vapores preparan tu cuerpo para unas manos llenas de energía y de
ritmo. Después, se limpian tus células muertas y empieza un masaje
capaz de hacerte perder los cinco sentidos. No por nada fue elegido
entre los mil lugares que no puedes dejar de visitar antes de morir.
3. SANDUNY BANYA (Moscú, Rusia)
Situados en el centro de Moscú, son la combinación
entre descanso y arquitectura. Fueron fundados en 1808 por un
actor de la corte de los zares, quien decidió crear estos baños junto
al río Neglínnaya. Después de un siglo de lujo y descanso, fueron
reinaugurados en 1896, ya envueltos en una magnífica arquitectura.
Su interior ricamente adornado, que nos recuerda a la Rusia de los
zares, tiene ocho baños de diferentes estilos, donde se mezclan la
cultura rusa, la india y la romana. Además, cuentan con un centro de
belleza único con detalles orientales, llenos de sofisticación. Médicos
y terapeutas forman parte del equipo que te recibe en una atmósfera
genuina. Masajes, tratamientos para el rostro y rejuvenecimiento
harán que tu semblante cambie a las pocas horas de visitarlo.
4. HOT SPRINGS (Arkansas, EUA)
Estas fuentes de aguas
termales son tan antiguas como el país que
las alberga. Durante 200 años, ha sido el
lugar de peregrinación para quienes buscan
tratamientos medicinales o relax. Tanto creció
la demanda por este destino que junto a
sus aguas milagrosas nació una ciudad: hoy
rodea el Parque Nacional Hot Springs, y las
aguas nacen en la zona urbana de Bathhouse
Row. Aquí se pueden recorrer los históricos
balnearios del llamado spa de América.
Ubicado entre las montañas de Arkansas,
las actividades van desde senderismo hasta
recorridos en ruta con vehículo o picnic. La
grandeza de los paisajes de este lado de
América son un tesoro de aguas curativas,
con dos siglos de tradición y naturaleza para
contemplar y relajarse.
5. GELLÉRT BATHS (Budapest, Hungría)
Visitamos otra ciudad
termal, donde la tradición de los baños forma
parte de su cultura. Hablamos de Budapest, una
ciudad única donde abundan las fuentes de aguas
curativas. Su tierra expulsa refrescantes chorros a
30ºC, en una tierra donde el invierno castiga con
dureza. En 1934, la ciudad fue nombrada Spa City,
totalmente pionera en la búsqueda de la salud
por medio del agua. El baño termal Gellért con su
alberca de columnas es uno de los iconos de los
grandes templos de balnearios. El hotel nació en
1918, y después se añadió el espacio para albercas
y aguas que para muchos es el spa más famoso
de Europa. Gellért Bath ofrece tratamientos de
agua medicinal utilizando los mismos manantiales
profundos subterráneos de los Caballeros de San
Juan que se usaban en el siglo XII. Vivir la elegancia
de un edificio estilo Art Nouveau que está a punto
de cumplir cien años es una experiencia única. Un
estandarte de los placeres de la vieja Europa.
6. TERMAS DE PUCÓN (La Araucanía, Chile)
Este rincón al sur está rodeado de tierra viva
con gran actividad geotérmica y volcánica. Destacan en la región las
Termas Geométricas, en un entorno de selva y de cascadas entre
frondosa naturaleza. Cuenta con 16 pozos de aguas termales con
temperaturas entre 32 y 42ºC. No muy lejos de ahí, en Coñaripe,
podemos disfrutar de albercas techadas con hidromasaje y un
buen alojamiento. A 34 kilómetros de Pucón está el Parque Termal
Menetúe con albercas techadas. También podemos visitar las termas
de Huife, con chocoterapia, reflexología o fangoterapia: un centro
termal del siglo XXI. Finalmente, para los que aman la naturaleza en
primera fila, Termas el Rincón tiene una gran oferta de tratamientos y
paisajes en una región única.
7. TERME DI SATURNIA (Grosseto, Italia)
La Toscana es una de las
zonas donde la naturaleza ha sido más generosa
con las aguas termales. Allí se encuentran
las hermosas Termas di Saturnia, grandiosas
y abiertas al público con grandes albercas
naturales y cascadas como la del Molino. El
origen de este fenómeno de la naturaleza es un
pequeño río, el Gorello, que nace en el Monte
Amiata, un viejo volcán dormido cuya silueta
domina el Valle de Orcia. Aguas sulfúreas ricas
en azufre, sulfato, carbón, llenas de propiedades
terapéuticas. No lejos de esta propuesta popular
se encuentra el exclusivo lugar del mismo
nombre, Terme di Saturnia, con albercas, campo
de golf, tratamientos de belleza, jacuzzi, cascadas
y corrientes de agua fría y caliente.
8. LEUKERBARD (Valais, Suiza)
Un rincón en el corazón de Suiza bajo un glaciar,
donde se unen las termas con los campos de nieve en invierno o
los verdes pastos en verano. Baños de agua mineral caliente con
una propuesta que ofrece lujo exclusivo o una estancia más familiar.
Situado en Valais, es probablemente el balneario más alto, donde a la
cumbre de los Alpes llega el agua hasta a 51ºC. Además de un entorno
deportivo de esquí, la zona ofrece grandes hoteles de lujo con servicios
de spa muy exclusivos, saunas, masajes y tratamientos de belleza.
Walliser Alpentherme & Spa Leukerbad es uno de los balnearios más
elegantes del mundo. La clave es la relajación y los cuidados médicos y
de belleza. Fisioterapia y rehabilitación completan el programa, donde
la calidad de los servicios se orienta al bienestar.
10. TAKARAGAWA ONSEN (Prefectura de Gunma, Kanto, Japón)
Otro escenario magnífico de nieve y bosque
a 10 minutos del resort de esquí Minakami
Hodaigi. Rodeados de naturaleza, sus baños
termales atraen a viajeros de Japón y de
todo el mundo, entre árboles, plantas y una
vegetación espectacular junto al río Takaragawa.
Sus aguas templadas y transparentes son
una bendición, pues el paisaje cambia cada
estación: hojas otoñales, la montaña nevada
o el verde primaveral que llega con sus ramas
hasta el borde del río. La nieve, las piedras y la
arquitectura japonesa nos hacen sentir en un
cuento oriental . Además, su gastronomía te
aterriza en un mundo que completa la escena de
este paradisíaco jardín japonés.
9. YANPANCHEN (Lhasa, Tibet)
En las
mágicas y hermosas
tierras del Tibet se
encuentra este paisaje
geotérmico, con 40
kilómetros cuadrados
y agua caliente a 70ºC,
que hierve entre burbujas
y una niebla espesa y
única. Montañas y praderas se ven envueltas por el vapor, a 90
kilómetros de Lhasa. Aquí ocurre el milagro de poder darse un
baño de agua caliente a 4200 metros sobre el nivel del mar.
El mejor momento para zambullirse es a primera hora de la
mañana, para disfrutar de ese raro milagro de ver caer copos de
nieve mientras nos damos un baño caliente y revitalizador.