Probamos la moto BMW R 18, una auténtica joya cruiser
Subtítulo Acompañados de Luís Álvarez, destacado participante de innumerables competencias 'Iron Man', pusimos a prueba las prestaciones de la BMW R 18. Aquí te contamos nuestras sensaciones.

Sin duda, un hombre inquieto que se sube ahora con Gentleman a la nueva R 18, y en primer lugar admira sus líneas vintage, pero con última tecnología, un sonido de motor muy atractivo y una gran potencia que invita a largos recorridos. “De arranque la vibración te invita a muchas revoluciones, es importante tener una buena postura para un viaje cómodo. Es un gran juguete, te diviertes y puedes ir a donde quieras. Es retro pero con un gran motor”, señala.

Circula satisfecho por la Ciudad de México y reconoce los detalles de un vehículo con un diseño excepcional que, sin duda, reviven las raíces del motociclismo. El motor de dos cilindros big boxer es muy estético. Buena suspensión y amortiguadores con frenos de disco doble adelante y mono disco atrás que garantizan seguridad.

Seis cambios y opción de marcha de reversa. El depósito de 16 litros invita a grandes paseos. La idea es manejar con una postura relajada, iluminación led, con un display clásico. Pero también con tecnología digital como se puede ver en su tacómetro. La sensación al volante es de estabilidad con una iluminación que ayuda en las curvas y un frenado suave apoyado por una amortiguación que se ajusta a las marchas. Sin duda estamos ante un vehículo muy deseado que une toda la emoción de la motos vintage con una tecnología de vanguardia, desde el motor, las velocidades y los amortiguadores, une lo mejor de los dos mundos. La primera edición llega con equipamiento exclusivo, y ofrece muchas opciones de personalización. Es la vuelta al segmento cruiser de BMW y lo hace a lo grande. Su presencia en las calles de México impone respeto.