Esta casa vitivinícola no es una más en el amplio panorama del vino, sino que se perfila como uno de los modelos más innovadores en este sector. Desde el diseño de su botella hasta su etiqueta, se percibe que guarda en su interior un vino español sorprendente. Basta poner como ejemplo su etiqueta Habla del silencio, reconocida, de manera consecutiva, como el mejor vino tinto de España por la Asociación Española de Periodistas y Escritores de Vino de 2014 a 2017.
Pero, ¿qué los hace tan especiales? La respuesta no es simple y comienza, por supuesto, en el terreno donde se cultiva la uva. 200 hectáreas de tierra poco fértil, que siglos atrás había sido cultivada por los griegos y donde entra en acción la expertise de los vitivinicultores, quienes saben ejecutar los mejores procesos para el cuidado de la cepa y lograr que se esfuerce por la búsqueda de agua. Esto tiene como resultado que la uva cuente su propia historia al momento de la degustación y de cada uno de los vinos Habla, que, dicho sea de paso, van desde vino tinto hasta blancos y rosados, todos reflejo de excelencia.
Aunque los vinos Habla no sólo basan su éxito en la uva, sino también en los procesos artesanales, mismos a los que incorporan las técnicas más modernas. Ellos los describen así: “vinos hechos con el corazón y utilizando los últimos avances de la ciencia”. Los vinos Habla seducen y enamoran, como su colección de Alta Costura con vinos blancos como el Habla del mar, con notas en boca frescas y florales y toques salinos. Los tintos no se quedan a la zaga, como el mencionado Habla del silencio, ensamble de Syrah, Cabernet Sauvignon, Tempranillo y Cabernet Franc, que logra un vino intenso y complejo, con toques de cereza, mora, menta, pimienta y grafito. Sin duda, a estos vinos sólo les hace falta hablar.